Últimos temas
Navegación
Noticias
Siempre es bueno que entrenemos, hace que sobrevivamos (Anthony)
Página 1 de 1.
Siempre es bueno que entrenemos, hace que sobrevivamos (Anthony)
Entró en la sala de entrenamiento. No sabía si estaba "habilitado" para entrenar, aunque la herida de la espalda ya ni le dolía, y parecía haber cicatrizado bien. Sin embargo, necesitaba descargar un poco la energía que acumulaba cada día que no veía a Magnus. No lo había vuelto a ver desde que el brujo lo había llevado al instituto y él había quedado inconsciente. Temía que aún estuviera enfadado con él, por lo que no se atrevía a ir a su casa, además que temía que levantara sospechas con sus padres.
Tomó el arco y las flechas con las que habituaba entrenar, y se posicionó delante de uno de los blancos. Tomo consciencia de cada músculo de su cuerpo, de la tensión de cada uno, y luego de apuntar, apenas entrecerrando el ojo izquierdo, soltó la primera flecha. Dio un paso atrás con una sonrisa de satisfacción cuando esta quedó clavada en el blanco. Parecía que su habilidad permanecía intacta. Ahí fue cuando recordó que había perdido el hermoso arco que le había regalado su prima Annabeth, lo había llevado cuando fue al Pandemónium y nunca lo había recuperado, parecía haberse esfumado igual que su estela y el serafín que llevaba consigo. Una mueca de tristeza se dibujó en su rostro, poco había disfrutado del arco, al fin y al cabo.
Sacudió ese pensamiento de su cabeza e intentó concentrarse de nuevo. Apuntó una nueva flecha y la dejó correr hacia el centro de la diana junto con muchas otras que casi nunca salían del círculo central. Estaba disfrutando aquello, la soledad de la sala de entrenamiento, la tensión de la cuerda en su mano, el silbido de la flecha al atravesar el aire y el golpe seco cuando llegaba al blanco. Era perfecto... hasta que se vio interrumpido por alguien que abrió la puerta y lo sobresaltó al punto de errar la flecha y clavarla en la pared por fuera del blanco.
Se giró con brusquedad, para descubrir a un joven de pie tan sorprendido como él. Lo reconoció como uno de los relativamente recién llegados al instituto. Suspiró buscando serenarse e intentó sonreír con cierta amabilidad. - Pasa, hay espacio para todos, no te quedes ahí de pie. Creo que no hemos sido presentados, yo soy Alec Lightwood, tu eres? - preguntó, a la vez que se acercaba al joven y le tendía la mano.
Tomó el arco y las flechas con las que habituaba entrenar, y se posicionó delante de uno de los blancos. Tomo consciencia de cada músculo de su cuerpo, de la tensión de cada uno, y luego de apuntar, apenas entrecerrando el ojo izquierdo, soltó la primera flecha. Dio un paso atrás con una sonrisa de satisfacción cuando esta quedó clavada en el blanco. Parecía que su habilidad permanecía intacta. Ahí fue cuando recordó que había perdido el hermoso arco que le había regalado su prima Annabeth, lo había llevado cuando fue al Pandemónium y nunca lo había recuperado, parecía haberse esfumado igual que su estela y el serafín que llevaba consigo. Una mueca de tristeza se dibujó en su rostro, poco había disfrutado del arco, al fin y al cabo.
Sacudió ese pensamiento de su cabeza e intentó concentrarse de nuevo. Apuntó una nueva flecha y la dejó correr hacia el centro de la diana junto con muchas otras que casi nunca salían del círculo central. Estaba disfrutando aquello, la soledad de la sala de entrenamiento, la tensión de la cuerda en su mano, el silbido de la flecha al atravesar el aire y el golpe seco cuando llegaba al blanco. Era perfecto... hasta que se vio interrumpido por alguien que abrió la puerta y lo sobresaltó al punto de errar la flecha y clavarla en la pared por fuera del blanco.
Se giró con brusquedad, para descubrir a un joven de pie tan sorprendido como él. Lo reconoció como uno de los relativamente recién llegados al instituto. Suspiró buscando serenarse e intentó sonreír con cierta amabilidad. - Pasa, hay espacio para todos, no te quedes ahí de pie. Creo que no hemos sido presentados, yo soy Alec Lightwood, tu eres? - preguntó, a la vez que se acercaba al joven y le tendía la mano.
Invitado- Invitado
Temas similares
» Yo siempre salgo ganando... Siempre obtengo lo que me place... [Nickolay]
» Funky [flashback] [Anthony Blacklight]
» Otro intento no le hace mal a nadie. (Edwige)
» Welcome To Our Party [Annabeth Lightwood & Anthony Blacklight] [+18]
» Un poco de publicidad no le hace daño a nadie. (Libre)
» Funky [flashback] [Anthony Blacklight]
» Otro intento no le hace mal a nadie. (Edwige)
» Welcome To Our Party [Annabeth Lightwood & Anthony Blacklight] [+18]
» Un poco de publicidad no le hace daño a nadie. (Libre)
Página 1 de 1.
Permisos de este foro:
No puedes responder a temas en este foro.
Vie Nov 21, 2014 9:49 am por Magnus Bane
» Unborn Children {Afiliación Normal - Cambio de nombre y botón}
Miér Nov 05, 2014 7:55 am por Invitado
» Comidas Graciosas... y ¿Paparazzi? || Valentina Devereaux
Dom Nov 02, 2014 1:03 pm por Valentina Devereaux
» Isabelle Lightwood
Sáb Nov 01, 2014 7:15 pm por Adhara D. Herven
» Parque de Diversiones….
Sáb Nov 01, 2014 6:42 pm por Yrenne Shadehound
» TALES OF BAGAROK {El alma medieval} - Cambio de botón (Élite)
Miér Oct 29, 2014 10:17 pm por Kyosuke Nightshadow
» Shadow Flames || Cambio de botón { Élite }
Dom Oct 26, 2014 10:44 pm por Kyosuke Nightshadow
» Soy Divergente. (ELITE) - Cambio de URL + Botón
Vie Oct 24, 2014 8:40 pm por Kyosuke Nightshadow
» Hola, hola
Jue Oct 23, 2014 6:47 pm por Alec Lightwood