Una espera incontrolable | Jane A. Gray

-"¿Ya has hecho lo que te pedí?"- me pregunto el hombre que estaba de espaldas frente a mi, solamente baje la mirada un poco pero sin dejar mi postura segura comencé a caminar por el despacho de mi actual jefe. -Si... no se preocupe le he dicho que no tardaria en completarlo- le respondí mientras tomaba un vaso de vidrio de la pequeña mesa de noche que se encontraba en una esquina de la habitación y le llenaba de brandy.

-"Espero asi sea, no quiero problemas con nuestros socios Nickolay"- me dijo finalmente mirándome de frente, él, el nuevo líder del clan Deveraux, el nieto de mi primer jefe. Me habían encomendado una mision muy especifica, mas para ellos habia tardando demasiado en realizarla. -Tranquilo, ya te dije que lo tenia bajo control, solo... me estaba divirtiendo un poco- me encogí de hombros mientras le daba un sorbo al vaso con el liquido marrón. Me deje disfrutar un poco el fuerte saber de aquel vaso de brandy. -"Sabes que confió plenamente en ti, mi abuelo lo hizo y mi padre igual, eres la mano derecha de los Deveraux desde hace tres generaciones Nick"- le mire posar su manos en su escritorio. Sonreí de medio lado al escucharle, esa vida no la había elegido yo, mas seguir en ella si, soy la mano derecha de uno de los lideres mafiosos de Nueva York.

-Yo se hacer mi trabajo, Casey- le dije dejando el vaso sobre su escritorio, camine hacia la puerta y la cerré de un fuerte portazo. Escuche después como bufaba, pero poco me importo, lo conocía desde toda su vida, sabia lo caprichoso que el podría ser, pero el tenia sus dudas sobre mi, lo sabia.

Estaba oscureciendo, lo cual me indicaba que era hora de irme a casa, durar todo el dia encerrado en ese edificio no me era muy placentero, menos despues de lo que habia pasado hace meses. Entre a mi auto y comence a conducir hacia Central Park. Al llegar me quede ahí en el auto esperando algo pero no sabia que.

Mi cabeza no dejaba de pensar en la chica, en las chicas que han pasado por mi vida, en el trabajo y en la mision que segun dije complete, pero ni cerca estuve de hacerlo. Habia traicionado la confianza de Casey al no hacer exactamente lo que me habian ordenado, desafie su autoridad dejando viva a esa bruja. Suspire y golpee el volante, estaba fastidiado, la presion de que me descubrieran era mayor, pero también el sentimiento de extrañar ese rostro me hacia enloquecer. Mire hacia al frente cuando una silueta paso cerca, podia haberla confundido pero mi cuerpo se movio por impulso.

Abri la puerta de mi automovil y baje rapidamente de el. Estire mi brazo hasta alcanzar el de la joven que habia visto, debia saber si era ella o mis ojos me jugaban una mala pasada. -Jane...- murmure algo bajo como un suspiro contenido.

Mi respiracion se contuvo cuando la vi, su rostro, seguia igual que siempre, pero a la vez era diferente. Inconscientemente la tome entre mis brazos y la aprete contra mi pecho.

Despues la empuje lejos con delicadeza por los hombros. -Hola...- le sonrei de medio lado mientras la soltaba y quitaba los lentes oscuros que tapaban mis ojos.

Alce la ceja al mirarle pellizcarse, ¿que rayos hace? Me pregunte internamente y colocaba mis lentes de son en el bolsillo interior de mi saco. -¿Jane...que haces?- le pregunte mi duda mientras le miraba extrañado.

Si, era una sorpresa verle aqui, quiero decir, una sorpresa muy grata, pero si ella estaba aqui podrian descubrir el secreto, no dudaba en que Casey me estuviese vigilando, por lo cual toma de la muñeca a la chica, llegando hasta el automovil plateado y abri la puerta del copiloto. -Entra...- le ordene amablemente mientras mantenia la puerta abierta y le indicaba con un brazo el asiento libre.

Cerre la puerta del copiloto y mirando a todos lados, analizando el lugar camine a paso firme hasta el aldo contrario del carro. Llegue a la puerta del piloto, la abri y me adentre al coche con una agilidad inhumana, digna de un vampiro como yo. Coloque la llave que correspondía para encender el auto en el lugar indicado y gire de ella, para que el motor se prendiera.

Miraba de reojo a Jane en lo que sacaba el carro del aparcamiento donde estaba situado, lloraba, algo que me extrañaba de ella, ya que no la conocí tan, sentimental. Podia ver su guerra interna a traves de su rostro, sus expresiones, ella era un libro abierto.

Comence a conducir entre las calles de Nueva York, con rumbo hacia el sur, a las afueras. Suspire cuando el transito comenzó a ser menos, aprete las manos en el volante. -Y ¿como has estado, brujilla?- me dispuse a hacer una pequeña platica, tal vez asi ella se relajaría un poco.

Sonrei cuando le escuche hablar, por fin una palabra que no fuera mi nombre y que si eso era un sueño. Seguia sin despegar mi mirada del pavimento, no queria tener un accidente con mundanos a no ser que me lo hubiesen mandado, pero ese era otro tema.

-Yo? Pues bien como siempre- me encogí de hombros y pase mi mirada de ella al retrovisor y asi rebasar a un automovil que desde hace un par de minutos me estaba hartando por ir tan despacio.

-Me alegra que estes bien...- solte en modo ausente y frunci un poco el entre cejo, preguntandome ¿que hacia ella aqui en NY?

Sonreí al notar como los semáforos se pasaban rápidamente al verde, sin dejarle tiempo a los demás conductores de los otros sentidos en pasar, bruja tramposa, pero a decir verdad me alegro el verle hacer eso, al menos asi llegaríamos mas rápido a nuestro destino, a un lugar seguro.

-Asi es... el mismo de siempre- le sonreí mirándole de reojo, decir que estaba enojado por tenerla aquí era mentir, en realidad me alegraba mucho el volverle a ver, pero me preocupaba, si ella estaba aqui había riesgo de que le descubrieran, aunque... moví la cabeza en negativa, seria algo muy loco pero podría funcionar.

Seguí manejando hasta tomar la autopista que nos llevaría al Lago Champlain, para tener un ambiente mas relajado encendí el radio del auto, escuchándose al instante una música electrónica de Avicii. -Lo siento olvidaba que lo tenia en esa estación-

Jane sonrió divertida al verlo… esa confianza en sí mismo fue lo que tanto le había fascinado de él…pero el chico parecía bastante pensativo y cuando lo vi negar con la cabeza supe que en alguna idea se le estaría tramando…

-¿En qué pensabas Nick?

Le pregunto curiosa mientras el chico conducía…. No sabía muy bien a donde iría pero se iba a dejar llevar… sus sentidos estaba tan nublados que no pareció importante a donde nos dirigimos. Luego escucho una estridente y fuerte música que salía de los altavoces del auto….

-¿Te gusta esa música?

Dijo divertida intentando sacar conversación.

-Si, es algo nuevo, escuche una canción de esas hace un mes y desde entonces me gusto- me encogí de hombros, mire por el retrovisor ya era de noche y no había mas luces en la carretera mas que las de mi coche.

-En cosas, algo alocadas pero te las diré cuando lleguemos- le dije con un tono algo bromista. Mire por la ventana del lado de Jane, el Lago Champlain ya se veía en todo su esplendor, y aquella construcción alejada también se iba acercando.

Sonreí de medio lado, y fruncí el ceño al darme cuenta de ello. ¿Cuantas veces había sonreído en tan poco tiempo? Se notaba que la presencia de la bruja me hacia bien, llevaba tiempo sin pronunciar alguna sonrisa.

-Ahora veras...- le conteste moviendo el auto a un pequeño camino que se acercaba aun mas al Lago. Conduje unos pocos minutos mas y la construcción que vi hacia apenas unos minutos antes por la autopista se vio frente a nosotros. La vieja casa victoriana y blanca se planto frente a nuestros ojos.

Aparque el auto frente a la entrada rodeando la fuente que había frente a ella, apague el coche y baje del mismo. -Bienvenida a mi casa- le di a entender el pequeño secreto a Jane cuando abrí la puerta de su lado en espera a que bajara.

-Andando- Le dije mientras caminaba hacia la puerta principal, abri con cuidado la puerta ya que aun era la antigua, aun no la remodelaba a como el interior. El exterior de la casa aun la hacia ver como una vieja y abandonada casa, pero por dentro ya le había hecho sus cambios, se veía como si fuese una época moderna.

-Adelante, siéntete cómoda, iré por algo de beber- le comente al caminar por el pasillo principal hasta la cocina. Ahí tome un par de refrescos y en una bandeja con vasos y hielo lo lleve hasta la mesa de la sala. -Que te parece mi cueva?-

Respuesta en: https://iam-shadowhunter.foroactivo.mx/t809-recuerdos-y-explicaciones-jane-a-gray#5851

ya pueden cerrar este tema.