~White House -Nickolay V. Dowsett-

Baje del auto en el que venia y mire el gran lago frente a mis ojos. Sin duda alguna era un lago muy hermoso y no era tan malo venir ahí al anochecer. Retire mi vista del agua para dirigirla a la vieja casa blanca, una gran mansión, algo vieja y con varios destrozos se presentaba frente a mi. Sonreí al reconocer que era la misma casa que había visto en una foto en el periódico de la ciudad. La estaban vendiendo desde hace mucho y ahora finalmente el jefe me había dejado comprarla, claro después de mucho insistir.

Aun no tenia la menor idea de como era posible que el olvidase a la chica por la cual regrese a New York, pero bueno ya ha pasado tiempo desde que volví, regrese a mi trabajo solo que ahora me encargaba de cosas mas importantes, negocios por las noches. Cerré la puerta del auto y me adentre a la casa, abriendo la astillada puerta a punto de caerse. Este lugar necesitaba remodelaciones, muchas, pero seria un grandioso lugar donde vivir cuando dichos arreglos estuviesen terminados.

Mire, como tantas veces anteriores, toda la casa admirando algunos sitios que no necesitaban tanto trabajo, finalmente mi dinero ganado se iría en algo productivo no solo en atraer mujeres de las cuales obtener alimento, sacudí mi cabeza de un lado a otro ante tale pensamientos, esa era las únicas cosas que odiaba de ser ahora lo que soy, vampiro. Estaba en una de las habitaciones de la segunda planta cuando escuche pasos por la mansión, alce la ceja extrañado, según yo no debía haber nadie aquí. Camine siguiendo el ruido, y mi expresión fue de total sorpresa al encontrar el, o mas bien a la causante. –Xamine…- susurre sin poder creerlo.

Seguia con la mirada perpleja, aun no podia creer que ella, la chica frente a mi fuera mi anterior novia. Al fin despues de tantos años la habia encontrado, una sonrisa se habia hecho en mis labios, de alegria, como no. Era grandioso el volver a verla, tenia cosas que preguntarle, muchas a decir verdad, como el porque desaparecio cuando regrese de aquel viaje, el viaje donde trate con todas mis fuerzas el conseguir una manera de hacerme inmortal, para estar a su lado. Reaccione justo a tiempo para esquivar la pequeña bola de chispas que me habia lanzado, una de las ventajas de ser vampiro... me movia rapido. -Xamine, tranqui..- mi palabra fue interrumpida por un nuevo ataque por parte de ella. -¿Podrias dejar de atacarme?- le pregunte volviendo a esquivar la esfera, ¿tanto odio tenia hacia mi? Ella fue la que desaparecio, no volvi a saber de ella, nadie sabia de ella, fue como si nunca hubiese existido en mi vida, pero yo sabia que si lo habia hecho.

Me acercaba lenatamente, tratando de no asustarla o algo parecido, teniamos que hablar, no solo para disculparnos mutuamente, sino que... bueno no queria que esta casa tuviera mas daños de los que ya tenia, despues de todo ya era mia. -Xamine, escuchame, se que debes estar confundida- levante levemente mis brazos -Solo escuchame...- le pedi de favor, tenia muchas cosas que decirle y preguntarle y una pelea entre nosotros no era una opcion, ni la mejor manera de reencontrarnos depues de tantos años.

Sonreí un poco mas tranquilo cuando Xamine dejo de atacarme, baje las manos y le mire con amabilidad, algo que nunca se me quitaría seria verle de esa forma, para mi ella siempre fue alguien muy especial, una chica que necesitaba algún apoyo, se lo trate de dar pero nos separamos, ella desapareció por completo. –Bueno ahora que veo te has calmado…- le mire indeciso –un poco, puedes decirme ¿Qué haces aquí?- me atreví a cuestionarle, debía saber cómo rayos nos habíamos encontrado en este lugar, y si todo este tiempo vivió aquí en New York porque nunca nos volvimos a ver hasta ahora.

¿Perdonar? ¿Qué diablos me tiene que perdonar? Alce mi ceja confundido, yo debería decirle que nunca le perdonaría por dejarme, irse y borrarle la memoria a todos haciendo que nunca existió en mi vida y en la de los demás. Mi antiguo jefe no tuvo ni idea de quien era esa linda bruja castaña y yo le perdí para siempre. -¿Perdonar?- parecía que solo saldrían preguntas de mis labios pero estaba muy confundido ahora.

Que hago aqui?!, No la pregunta es que hace èl aqui y vivo! Esa es la pregunta, pero bueno era claro que no me contestaria aun esa pregunta, en verdad me habia enojado el verle de nuevo, como debia reaccionar desdes de tanto tiempo, aparece de la nada, despues de que me deja sola, rompiendo mi corazon, el solo recordarlo me hacia sentir de nuevo ese dolor y las ganas de llorar y destruir todo, pero no dejaria que lo viera.- Pensando.. Me gusta venir a este lugar.. Tu que haces aqui? -levanto una de mis cejas y le miro fijamente. No habia cambiado nada, se veia que seguia siendo el mismo. Lo unico diferente que podia ver es su ropa ya no era la misma de cuando njos conocimos, un rapido flashaso de recuerdos se vino a mi mente, desde la primera ves que lo vi con su jefe hasta cuando se fue, definitivamente Nick me confundia muy rapidamente, pero no lograba sacar de mi mente a Kyo.

Suelto un largo suspiro y camino a una de las ventanas donde recargo mi espalda. Estaba tranquila hasta que me de sus labios salieron esas letras con gran confusion,- Acaso el convertirte te borro la memoria de lo que me hiciste?! -en mis palabras solo habia enojo y un poco mas de confusion, como era posible que no supiera del daño que me hizo al irse de esa forma, sin decir nada.- Te fuiste, sin decir nada, me dejaste sola, eso nunca lo perdonare. -mis ojos perdieron su brillo cuando dije eso ultimo, Nick habia sido el primero en todo, hasta en lastimarme y dolia.

Me gire dandole la espalda y enfoque mi mirada en el cielo, dejando que se nublara y empezara a llover poco a poco. No me preocupaba si le pasaba algo a la casa, yo la habia reparado en mis visitas anteriores, lo unico que dejaba igual era la fachada para no levantar sospechas.

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-¿De lo que te hice?- mencione sin entender, ¿de lo que le hice? ¿yo? Que yo recordara ella fue la que desapareció e hizo que a todos se les olvidara su existencia, ella, con sus poderes ocasiono que nunca la pudiera encontrar, me dejo sin pistas de su paradero y ahora viene y dice que yo le hice algo. Me acerque un poco mas. –Xaminé…- comencé a decirle mientras mas me acercaba a ella. –Me fui… a un viaje, para convertirme en inmortal…- explicarle tal vez ahora no valdría la pena, habian pasado demasiados años, seguro tendría coraje, yo lo tendría, pero acepte el hecho de que le había perdido para siempre, cuando no la encontré después de regresar.

-Cuando regrese del viaje, todos… ¡Todos, se habian olvidado de ti! Ni una pista, ni una dirección, nada! Fue como si nunca hubieses existido, básicamente tu desapareciste, no yo!- saque lo que tantos años había pasado, los días en vela, que quería salir y buscarle pero el único tiempo que podía salir ahora era en la noche, días perdidos investigando su paradero. –Y estoy aquí, por que este es mi hogar, si aun faltan muchas remodelaciones pero pronto esta mansión estará mejor para ser mas habitable…-

Esto en verdad me estaba dando coraje, pero al mismo tiempo nostalgia y tristeza, él había sido el primero hombre que ame y con el que me sentí amada, pero también el primero que me rompió el corazón puede que no lo hizo adrede pero me había lastimado.- No iba a dejar rastro, nunca dejo rastro a donde voy. –esa era mi forma de trabajar cuando se trataba de trabajar para mundanos ,nunca les dejaba una pista mia.- Tuviste muchas pistas, sabias de donde era, te conté a donde iba cuando me iba de un lugar.. no me puedes decir que no deje rastro –cerré los ojos, y presione con mis dos dedos el puente de mi nariz, quería llorar pero no lo iba hacer.

Definitivamente andaba muy sentimental.

Al escuchar que me decía que era su casa, mis planes sobre comprarla y re modelar la se vinieron abajo, ciertamente me había enamorado de esta casa pero bueno, existían mas puede que después me gustara otra, o mandaría a construir una con mi propio estilo.- Felicidades entonces.. –no digo mas y empiezo a caminar hacia afuera, estaba lloviendo gracias a mi pero no me importaba el mojarme, me gustaba de echo.

Ahora no podía pensar mucho, y estaba por colapsar, por lo que mejor era que me fuera de este lugar antes de que pasara. Mi mente estaba lleno de recuerdo de noches y días con él, pero también estaba llena de pensamiento sobre Kyo. Ya no sentía nada por Nick, pero aun así los momentos que estuve con él fueron verdaderos y los recuerdo muy vivos, como si estuviera en ese momento, por eso me afectaban tanto. –Espero en algún momento poder, perdonar y verte.. –esas fueron mis últimas palabras antes de salir de la casa.